Esta emocionante competencia reta a los participantes a diseñar y construir un robot controlado de forma remota (RC, Bluetooth) capaz de recolectar piedras lunares en el menor tiempo posible. El desafío se desarrolla en un terreno simulado con obstáculos de diferentes dimensiones y características, que pondrán a prueba la capacidad del robot para adaptarse y superar limitaciones de movilidad.